Taste
El sabor de la felicidad, ese que te llena y sabes que es lo mejor que has probado jamás. El sabor de verte realizada, de saber que puedes conseguir cualquier cosa que te propongas. Si caes, puedes lamentarte, pero sólo cinco minutos, luego tienes que levantarte. Las cosas que deseas no se consiguen porque sí, tienes que luchar por ellas, por ti. A veces es difícil, por que no ves el final del camino, pero está ahí, cree en que lo verás. Verás la meta, pero en el momento correcto, unas veces llega pronto y otras no. Si tardas en llegar y te impacientas, puede que quieras rendirte y ese es el momento en que tienes que preguntarte: ¿Vale la pena? Si la respuesta es un no: laméntate, pues has perdido el tiempo. Si la respuesta en sí: mantente firme y llegarás. - Beatriz.