I'm a nightmare dressed like a daydream.

No era verano,
ni otoño,
ni primavera,
ni invierno,
no era la estación,
no era ni el día ni la noche.

Era la niebla,
tan presente y a la vez tan transparente,
como un muro líquido que puedes atravesar con facilidad,
pero no veía,
no me encontraba a mí misma,
ni a nadie,
ni a nada,
todo era una combinación de blanco y gris,

era asfixiante,
la tristeza era así.

¿Me estoy volviendo loca?
Esa era mi mayor cuestión.

De repente era algo que más que asfixiarme,
era ahogarme,
no podía respirar bien,
era como si hubiera estado en ese lugar por siglos y además de tener un tiempo limitado...
También tuviera un oxígeno limitado.

Mis pulmones se estaban invadiendo de agua, sentía como desde la punta de los pies el nivel de agua subía segundo a segundo.

Empecé a encogerme,
a echarme atrás,
esa es la primera reacción,
además de agarrarte la garganta.

Y de repente...

Una sombra en la niebla.

¿Quién sería el extraño?
¿Un hombre o una mujer?

No lo sabía.
Nunca lo llegué a saber.

Me empujó y justo detrás...
Una piscina esperándome,
pero no era una piscina cualquiera,
era mi infierno hecho realidad...

Me quedé paralizada,
no podía mover ningún músculo,
y al fin...

Me ahogué.