Huecos

Es triste oír sin escuchar, oír una melodía de fondo sin ponerle nombre y tan sólo pensar en nuestras cosas, ese momento en el que miramos distraídos a todas partes pero sin observar ninguna.

Quieres dejarte ir, pero no puedes, tienes esa ataduras que creías pequeñas pero no lo son; hace ya mucho tiempo que mi cerebro decidió irse de vacaciones y sólo se presenta cuando estoy de exámenes - y aún así está que hecha humo -.

Quiero centrarme en lo que de verdad quiero, no en esas cosas que tan sólo me distraen de mi objetivo final; quiero dejar de oír para escuchar lo que verdaderamente capta mi atención, esa cosita brillante que es como una luz al final del túnel, esa luz que es mi esperanza, esa luz que espero no sea un tren; quiero mirar, quiero observar lo que de verdad importa y apartar esas cosas insignificantes.

Quiero difuminarme, quiero meterme en el paisaje, meterme en ese mar de sentimientos encontrados para no volver, quiero desaparecer para dejar un hueco que sea imposible de rellenar, un hueco que sea observado por alguien que decida que ese hueco - yo - es su luz.

- Beatriz.